Los más recientes hechos se suscitaron el sábado cuando el reportero se encontraba en la Presidencia Municipal realizando su labor.
Huauchinango, Pue.- El reportero Marco Antonio Licona Melchor, colaborador de distintos medios de comunicación, denunció a Bernardino López Domínguez, guardaespaldas del alcalde de Huauchinango por amenazas y acoso que han impedido sus labores informativas. Los señalamientos fueron rechazados por el guardia quien dijo que Licona “tiene delirio de persecución”.
Lee Acusa ex empleado despido injustificado del ayuntamiento de HuauchinangoAunque no es la primera ocasión en que Licona es intimidado por López Domínguez, los más recientes hechos de esta naturaleza se suscitaron el sábado pasado, cuando el reportero se encontraba en la Presidencia Municipal indagando la razón por la que un grupo numeroso de empleados se arremolinaban en el acceso principal.
Licona indicó que cada vez que visita el edificio público es perseguido por el guardaespaldas y este fin de semana no fue la excepción. “De momento me percaté que atrás de mí estaba Bernardino, como queriendo intimidarme cuando estaba haciendo mi trabajo”, dijo.
“Como no es la primera vez le pregunté que qué hacía detrás de mí y me dijo que yo tenía delirio de persecución y enseguida me espetó que me cuidara por lo que andaba haciendo. Le pregunté que si eso era una amenaza y me dijo que me cuidara solamente. Por eso salí del lugar”, informó.
En tanto, el guardaespaldas que dijo ser parte de la Dirección de Seguridad Pública, aunque nunca porta uniforme, rechazó las acusaciones y repitió algunas de las palabras mencionadas por Licona: “tiene delirio de persecución, sin embargo, él también, cuando nos encontramos en la calle, se me queda viendo de una manera retadora. ¿No sé qué se traiga conmigo?”.
Admitió que se acercó al reportero, pero no con el fin de amenazarlo, “yo estaba cuidando, esperando a que llegara Omar (Martínez Amador presidente municipal), porque yo me encargo de su seguridad, pero vi que ahí estaba tu compañero”.
Al reiterarle que el reportero lo acusó de haberlo amenazado exigió pruebas y reafirmó: “lo que pasa que él está mal de la cabeza”.
Aunque siempre anda con ropa común, “de civil”, Bernardino aceptó que porta armas de fuego con el debido permiso de la Secretaría de Defensa Nacional y mostró de lejos un papel que aseveró es tal documento, pero impidió que se verificara.
En mayo de año 2011, el mismo personaje intentó intimidar a nuestro compañero reportero Marco Antonio Licona, por el seguimiento periodístico que le dio a los casos de inconformidad postelectoral en algunas juntas auxiliares del municipio de Huauchinango.
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