Inconcluso deja edil de Teotlalcingo su proyecto de la planta de tratamiento

Teotlalcingo, Pue.- El ayuntamiento de San Felipe Teotlalcingo heredará a la próxima administración el proyecto de la planta de tratamiento, la cual tiene un costo de ejecución de 6 millones de pesos, reconoció el alcalde Edgar Aguirre Rodríguez, quien a tres meses de que concluya su administración mencionó que este proyecto tendrá que ser ejecutado por Moisés Jiménez, el edil entrante.

Sin embargo, reconoció que los trabajos ya presentan un avance significativo toda vez que cuentan con el terreno donde habrá de ubicarse esta planta de tratamiento, el cual tuvo un costo de 200 mil pesos y se ubica en la población de San Matías Atzala.

En entrevista para municipiospuebla.com.mx Edgar Aguirre mencionó que la construcción de la planta de tratamiento fue parte de sus propuestas de campaña, pero por lo elevado de su costo, así como por la gestión de los recursos ante diversas instancias y las bajas finanzas del ayuntamiento, la obra tendrá que ser heredada.

Pese a ello, el edil confía en que su sucesor pueda dar continuidad al proyecto y permitir que Teotlalcingo cuente con su propia planta de tratamiento, la cual permita el saneamiento de las aguas que actualmente son depositadas en la planta de San Salvador El Verde.

Finalmente resaltó que durante su gestión y con el apoyo de la Comisión Nacional del Agua se logró la ampliación de la red de drenaje sobre la zona de la barranca de Agua Santa y toda la rivera del Rio Acotzala, la cual durante años sufrió severos problemas de contaminación debido a la descargada de miles de litros de aguas negras.

El municipio de San Felipe Teotlancingo se localiza en la parte centro del estado de Puebla, al pie del parque nacional Iztaccihuatl. Pertenece a la cuenca del río Atoyac, una de las cuencas más importantes del estado, y que tiene su nacimiento cerca de los límites del estado de México y Puebla en la vertiente oriente de la Sierra Nevada.

Los glaciares del Iztaccíhuatl pueden almacenar agua y alimentar los poblados y terrenos de sus faldas en la época de sequía; las rocas y suelos dejan infiltrar el agua hasta grandes profundidades, por lo que al pie de los volcanes puede obtenerse agua de pozos durante todo el año.