El procurador General de Justicia, Víctor Carrancá, informó que las personas que provocaron los desmanes ya fueron señaladas
Los dos hombres que ayer fueron linchados en el municipio de Ajalpan, no han sido identificados todavía por sus familiares, por lo que aún no está claro si efectivamente se trataba de unos encuestadores o de presuntos delincuentes, informó el procurador de Justicia, Víctor Carrancá Bourget.
Indicó que, en la carpeta de investigación que se inició por este doble homicidio, aún no se ha establecido quiénes y de dónde eran estas personas, así como el trabajo que desempeñaban, por lo que están tratando de ubicar a la mamá de la menor que presuntamente fue jaloneada por unos “robachicos”, a fin de que declare y reconozca si los occisos fueron los mismos que intentaron robarle a su hija.
También dijo que, en sus declaraciones, los policías y otros funcionarios de ese municipio hicieron señalamientos contra las personas que incitaron a los pobladores y provocaron todos los desmanes, de modo que las autoridades ministeriales tendrán que fincar las responsabilidades a quienes correspondan.
“En su momento procederemos conforme a derecho, en este caso estamos en presencia, clarísimamente, (de) un delito de homicidio y por tanto tenemos que proceder en consecuencia”, afirmó.
En ese sentido, aseguró que ya hay órdenes de aprehensión y detenidos por otros casos similares, como el de los dos secuestradores asesinados en abril de 2012, en la localidad del Aguacate, enclavada en la mixteca poblana, donde los habitantes les aplicaron la "Ley Fuga".
“Ahí se procedió en contra de los pobladores. Ahí tuvimos suficiente material videográfico para realizar las consignaciones y en este caso haremos lo propio”, sostuvo. No obstante, es preciso mencionar que la Procuraduría General de Justicia (PGJ) nunca informó sobre esas detenciones.
Respecto al tema de los linchamientos consideró que “es muy reprobable”, ya que “estos hechos no son permisibles. La gente no puede ni siquiera tomar justicia por su propia mano, porque no está claro (lo que sucedió), sino simplemente perder el control y los ánimos y agredir a dos personas al grado tal de privarlos de la vida”.
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