El miércoles anterior este hombre de 57 años de edad y con 35 años de bolero, fue visto parado más de una hora frente a una de las cintas amarillas en el zócalo
Atlixco, Pue. Una semana después de quedarse sin lugar para ejercer su único y antiguo oficio de bolero tras el cierre del zócalo por el coronavirus, Manuel Sánchez encontró finalmente una oportunidad de ganar dinero no sólo limpiando zapatos, también de improvisado auxiliar urbano de movilidad, mejor conocido como ‘viene-viene’.
Lee Ambulantes de Metepec dejarán las calles a partir del 15 de abrilEl miércoles anterior este hombre de 57 años de edad y con 35 años de bolero en la plaza pública, fue visto parado más de una hora frente a una de las cintas amarillas colocadas para cerrar el paso a las personas a ese parque consecuencia de la pandemia y sus medidas sanitarias.
Y desde ahí lanzó una queja y una solicitud: “el presidente municipal Guillermo Velázquez Gutiérrez o el director de Comercio, Abasto y Vía Pública, René Tetlamatzi, deberían ofrecer una alternativa para seguir ganando dinero con ese oficio. Un lugar en una esquina y nada más”.
Los días pasaron y ante una falta de respuesta, pasaba algunas horas frente al zócalo intentando saber dónde trabajar. “De pronto supe que uno de los auxiliares viales urbanos regresó a casa para protegerse por ser mayor de edad. Y decidí ocupar su lugar por el momento. Son algunos pesos, pero sirven”.
Foto: Lena Velázquez
cdch
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