Ejidatarios enfrentarán a la delincuencia con Infantería de Defensas Rurales

Ejidatarios buscan incorporarse al Cuerpo de Infantería de Defensas Rurales (CIDR) del Ejército Mexicano para hacer frente a la delincuencia y frenar el robo de maquinaria, equipos y cosechas.

Ante la imposibilidad legal de crear una policía rural, hasta ahora ésta ha sido la única alternativa para encarar el problema de inseguridad en las zonas agrícolas, aseguró Alfredo Montiel Bretón, comisariado ejidal de San Luis Huamantla.

Aseguró que esta defensa es implementada debido a que se frustró el intento de conformar una policía rural, ya que este concepto no procede porque no se encuentra establecido en la ley, tanto federal como estatal.

Montiel Bretón informó que, con apoyo del Quinto CIDR, se realizan rondines en la zona oriente, desde El Carmen Tequexquitla.

Explicó que estos recorridos sólo son de carácter “preventivo y de alerta”, en coordinación con la Policía Estatal y la Ministerial, así como la Guardia Nacional (GN), a fin de fortalecer la presencia y de que la sociedad se entere de esta vigilancia.

En una reunión efectuada en la XXIII Zona Militar, los ejidatarios que forman parte del CIDR expusieron la necesidad de una adecuación a la legislación para la creación de este tipo de corporación, pero la respuesta fue que no es viable.

Agregó que también se requirió armamento automático “ya que los delincuentes están mejor armados”, pero tampoco fue autorizado porque a nivel nacional existe la experiencia de un mal uso de artefactos de alto calibre.

Informó que en breve se integrarán a esta región entre dos y tres pelotones conformados por ejidatarios jóvenes y sus hijos, pues se ha emitido una invitación para que se sumen a las acciones de vigilancia.

Se requerirá, dijo, proceso puntual en el que se aplican diversos filtros, ya que las personas tienen que demostrar un nivel de confiabilidad y que no estén vinculadas con actos ilegales, “que no sean maleantes”, puntualizó.

“Estamos un poquito cerrados para que no entren gentes que pudieran hacer un mal en lugar de un bien, que sean hombres honorables, que sean confiables”, indicó.

Refirió que en calidad de miembros del CIDR portan un uniforme y un arma, ”que es un rifle mosquetón”, proporcionada por el Ejército Mexicano “para la defensa de nuestra comunidad y de nuestra propia familia”.

Enfatizó que esta es la garantía “que tenemos de estar en este grupo”, ya que ese artefacto se puede tener en casa; no percibimos un sueldo por realizar esta labor”, pero se reciben adiestramientos de manera periódica.

Montiel Bretón puntualizó que las facultades de los miembros del CIDR son restringidas, pues no pueden realizar puestas a disposición. Sin embargo, destacó que su papel de colaboración con el Ejército Mexicano es importante.

En la zona oriente operan cerca de cinco pelotones que cuidan las áreas de cultivo, pues el robo de tractores, de cosecha y de tubería de sistemas de riego, no se ha detenido, concluyó.

Foto: Archivo-e

LSM