No es el falo, señor Noroña

Caballero de fina estampa

Un lucero que sonriera bajo un sombrero

No sonriera

Más hermoso, ni más luciera

Caballero

En tu andar, andar, reluce la acera al andar, andar

Isabel Chabuca Granda

Dime de qué presumes y te diré de qué careces.

Refrán

Eunuco

1. m. Hombre castrado.

2. M. hombre poco viril, afeminado.

3. M. Hombre castrado que se destinaba en los serrallos a la custodia de las mujeres

1. m. Hombre castrado.

2. M. hombre poco viril, afeminado.

3. M. Hombre castrado que se destinaba en los serrallos a la custodia de las mujeres

No es el pene lo que hace a un hombre ser un hombre de verdad.

Y sí, adrede uso una palabra tan explícita como la que utilizó Gerardo Fernández Noroña. La diferencia es que él no tiene ni la más remota idea del significado del concepto que escribió en su mensaje de Twitter.

¿Le molestará al diputado que utilice la palabra “pene”? Por si acaso le afecta, permítame ustedes incluir sus sinónimos como son falo, verga o pito. Son términos con los que se nombra al miembro viril de manera correcta y no de forma vulgar, ni distorsionada, ni porril como lo hizo el legislador.

Cuestionable y soez su forma de llamar a otro hombre, en este caso a Sergio Mayer, “eunuco”. Grosera la manera para sobajarle; tan ruin como todo lo que hace en política.

Usar su mal machismo (redundante, pero increíblemente existe eso) para denigrar a quien se atreva u ose a señalar los problemas y cinismos del hoy movimiento gobernante.

Una vez más, en redes, el diputado del PT derramó su ignominia al poner: “Eres un eunuco. Nunca debiste ser parte de nuestro movimiento”. Y todo porque el actor/empresario —antes diputado por Morena—, Sergio Mayer, escribió un “yo pago los lentes e invito unas cervezas” al respecto del caso de El Pelón Gomis y Vicente Serrano.

Ante el vituperio, Mayer le contestó al diputado Gerardo Fernández Noroña describiendo lo que este último es: “habló #LordProvocador, porro y vividor de la política. Ve trending y se le ofrece raide”.

Y tiene razón. El petista es capaz de utilizar cualquier tema, momento o sinrazón para darse a notar. Desafortunadamente nunca para de ofrecer opciones constructivas; lo suyo es denigrar y ser un vividor de la esfera pública.

Un eunuco es un hombre capado, capón, castrado. Aquel que con testículos o sin ellos no se atreve ni osa presentar sus convicciones ante el poder que le sobrepasa. O quien, por anhelar el poder —sin obtenerlo—, se dedica a brillar a costa de otros. Díganme ustedes, ¿a quién le cae como anillo al dedo tal descripción?

Se vale ser liberal, al extremo de que quienes escuchen los conceptos puedan enarcar las cejas o confundirse por su ignorancia ante ciertos términos o conceptos sexuales. Pero ser sumamente liberal no es sinónimo de usar conceptos sexistas. Importante diferencia. Entonces, de allí a disfrazarse de liberal para únicamente ser un vulgar, hay mucha distancia.

Hoy más que nunca se requieren diputados que estén dispuestos a debatir sus dichos y sus ideales con razonamientos. Que puedan discutir usando los conceptos y las explicaciones adecuadas, no la palabrería barata y la barbajanería. El recurrir a esto último es —ahí sí— una muestra inequívoca de ser poco hombre; ‘un porro y vividor de la política’.

Analizando las diferentes definiciones de la palabra “eunuco” podemos concluir que estos son aquellos quienes no tienen los testículos para dialogar y debatir basados en razones; los que se dedican a sobajar a quien piensa de forma diferente.

Supongo que, ante las rabietas de Fernández Noroña y su necesidad de sobresalir, aunque para ello sea un vulgar soez, es López Obrador el que debe estar maldiciendo la hora en que incorporó al diputado como aliado al Movimiento. Me refiero, naturalmente, a Fernández Noroña, no a Mayer Breton.

Columna de Verónica Malo en SDP Noticias

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