Confirma Bartlett nuevo trazo del gasoducto Tuxpan-Puebla-Tula

A fin de no afectar las tierras de comunidades indígenas de Puebla e Hidalgo, se realizará un nuevo trazo de la ruta del gasoducto Tuxpan-Tula, confirmó el director de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett Díaz.

Así lo expuso el funcionario al anunciar dos acuerdos de participación en sociedades con las empresas TC Energía y NewFortress Energy Corporation, en el marco de la inauguración de la Refinería Dos Bocas “Olmeca”, en Paraíso, Tabasco.

Con la primera empresa, expuso el ex gobernador de Puebla, se desarrollará la extensión del ducto marino desde Texas, hasta Coatzacoalcos, el cual permitirá contar con infraestructura nueva para llevar gas natural a la planta de licuefacción en Salina Cruz.

Sostuvo que ello resolverá la problemática del gasoducto Tuxpan-Tula, además con un nuevo trazo que cumplirá con la instrucción presidencial de no afectar los derechos de las comunidades de Hidalgo y Puebla.

El gasoducto Tuxpan-Tula enfrenta el rechazo de comunidades de Puebla e Hidalgo, al argumentar el peligro para sus comunidades y la afectación a tierras que consideran ancestrales. Al proyecto le falta la conclusión de un tramo de 100 kilómetros.

El gasoducto Tuxpan-Tula tendrá una longitud total de 263 kilómetros y transportará 886 millones de pies cúbicos de gas diarios. Se conectará con la línea de gas submarina Texas-Tuxpan, otro proyecto en el que se ha calculado que se invertirán 3 mil 100 millones de dólares y tendrá una longitud de 800 kilómetros.

El trozo original contempla el paso por los municipios poblanos de Venustiano Carranza, Francisco Z. Mena, Jalpan, Tlaxco, Tlacuilotepec, Pahuatlán y Honey; por los veracruzanos de Tuxpan, Poza Rica e Ixhuatlán de Madero y los hidalguenses de Acaxochitlán, Atitalaquia, Atotonilco, Tolcayuca, Tulancingo, Villa de Tezontepec, Zempoala, Singuilucan, Tenango de Doria y Metepec.

Bartlett expuso ayer que el proyecto también eliminará la posibilidad de resolver diferendos mediante arbitraje para el gasoducto Tula-Villa de Reyes.

Además, la extensión adicional a Dos Bocas permitirá contar con infraestructura nueva para transportar gas natural al sureste del país y a la península de Yucatán y unificará todos los contratos de transporte en el centro del país, desde Tamazunchale a Tuxpan, en un solo contrato con tarifa nivelada, lo cual coadyuva a la estabilidad de los costos de generación de electricidad durante 25 años, agregó.

"El monto de inversión serán 5 mil millones de dólares, generará 900 empleos directos y 450 empleos indirectos, CFE tendrá una participación accionaria del 15 por ciento en toda la sociedad y a partir del 2026 irá aumentando su participación en el nuevo ducto de extensión del marino hasta ser propietario del 49 por ciento”.

En cuanto a NewFortress Energy Corporation, la CFE será socio en un proyecto de licuefacción de gas natural, en la compra de una planta de generación adicional en BCS y garantizar el suministro de gas natural en la misma región.

Además, brinda a la CFE la oportunidad de contar con buques de dicho combustible a precio de costo, para atender las necesidades de las terminales en Altamira, Tamaulipas y Manzanillo, Colima.

La inversión prevista es de 2 mil 200 millones de dólares, se prevén 100 empleos directos en la fase de construcción y 100 empleos directos adicionales en la fase de operación.

Ahí participará la CFE como accionista de la sociedad. Quince por ciento del proyecto que se conformará con el 10 por ciento de participación en el primer módulo de licuefacción; 15 por ciento de participación en el segundo módulo de licuefacción y 20 por ciento en el tercer módulo, señaló el director de la CFE.

Foto: especial

gse