Reprueba la CDH condiciones de 9 Ceresos en Puebla

La Comisión de Derechos Humanos de Puebla reprobó la operación de nueve de los 21 Centros de Reinserción Social que operan en la entidad, según lo asentó en su Diagnóstico de Supervisión Penitenciaria 2023.

El peor lugar para estar internado es el Cereso de Tetela de Ocampo, que obtuvo una calificación de 5.1, mientras que el mejor evaluado fue el de Zacatlán, que llegó a 7.5 unidades, en una escala de cero a 10.

Según el organismo, todos los centros carcelarios de la entidad van de la calificación reprobatoria a la aprobatoria con “áreas de oportunidad”, pero ninguno logró ubicarse en la aprobatoria con “observaciones mínimas”, es decir, de 8 a 10 puntos.

A nivel general, los ceresos poblanos obtuvieron una calificación promedio de 6.4.

Los que recibieron las notas más bajas fueron Tetela de Ocampo con 5.1, Ciudad Serdán y el Centro Penitenciario para Adultos Mayores Privados de la Libertad con Enfermedades Crónico-Degenerativas y con Discapacidad (CEPEAM) con 5.3 cada uno.

Mientras que figuraron Zacatlán con 7.5, Libres con 7.4 y Tlatlauquitepec con 7.3.

Cabe destacar los casos del Cereso de Puebla capital –el más grande del estado-, que reprobó la evaluación con 5.8 unidades; Tehuacán cayó con 5.9; el estatal de Ciudad Serdán con 5.3.

Sólo el centro de mediana seguridad de Tepexi de Rodríguez obtuvo 6.7 de calificación.

Sobrepoblación, falta de medicamentos e instalaciones, las fallas recurrentes

El organismo destacó que existen tres problemáticas preponderantes que afectan el buen desempeño del sistema penitenciario en el estado de Puebla.

En primer término, el hacinamiento que impacta negativamente en la reinserción social de los internos, pues al alojar a un número mayor respecto del máximo para el que las instalaciones fueron diseñadas, trae diversas problemáticas a la población en servicios y actividades cotidianas.

En segundo lugar está la falta de medicamentos y las deficiencias en su cadena de suministro, lo cual “pone en alto riesgo la vida y la salud” de las personas privadas de la libertad.

La CDH señala que se debe garantizar el tratamiento de cuadros de salud emergentes como gripes o malestares estomacales, así como enfermedades crónico degenerativas, como diabetes, hipertensión, insuficiencia renal; incluyendo además tratamientos de índole psiquiátrica.

En tercer lugar, destaca que los Ceresos distritales y regionales se encuentran alojados en inmuebles adaptados para su uso, y no así en instalaciones debidamente diseñadas como Centros Penitenciarios.

Foto: CDH

gse