Fábrica del Carmen en Texmelucan conmemora su centenario de registro

Texmelucan, Pue.- Este miércoles 28 de agosto se conmemoró el primer centenario del registro de la Fábrica de Hilados y Tejidos de Texmelucan (El Carmen), un evento lleno de nostalgia y recuerdos para quienes ahí trabajan.

Construida a finales de 1900 esta fábrica se convirtió en el centro fabril más importante de la región, pues daba trabajo a obreros de distintas juntas auxiliares.

Al paso del tiempo el complejo fabril se redujo y actualmente la fábrica como tal y algunas estructuras, entre ellas parte de las calpanerías, la huerta, la cooperativa y el teatro Pedro Infante, aún se conservan.

Bajo este contexto este día el Sindicato de Trabajadores Mártires del 7 de enero llevó a cabo un evento en el que participaron los obreros y el personal administrativo, quienes se tomaron una foto para que este evento pase a la historia.

En el marco del centenario de registro industrial, de la Fábrica del Carmen, representantes del Sindicato Mártires 7 de enero, recibieron un cuadro con el dibujo de la cooperativa de esta empresa, obra realizada por el estudiante de arquitectura Daniel Saavedra Muñoz, alumno del cronista auxiliar César Pozos Romero.

En la entrega del cuadro, este joven, resaltó la importancia de mantener en la memoria la historia de Texmelucan y de su patrimonio arquitectónico.

El joven alumno hizo un llamado a la juventud, a ser partícipes para su conservación del patrimonio arquitectónico.

Tras recibir el cuadro, Gustavo Morales Tlayeca, líder del Sindicato Mártires 7 de enero, se dijo satisfecho de poder conmemorar los primeros 100 años de la inscripción de la Fábrica del Carmen en Texmelucan, la única del siglo pasado que se sigue en funciones.

Posterior a ello, hubo una misa de acción de gracias, para conmemorar esta fecha, en la que los obreros agradecieron la oportunidad de tener trabajo y de poder vivir un momento tan importante.

Finalmente, y como parte de este evento, fue activado de nueva cuenta el silbato que marcaba los horarios de entrada y salida de los obreros.

La última vez que sonó fue hace cuatro años antes de la pandemia por COVID-19.

Cabe mencionar que, al sonar el silbato, la gente de Texmelucan dijo que se active de manera permanente, pues forma parte de la cultura y tradiciones de este municipio.

Finalmente, los obreros compartieron el pan y la salud con una comida en la que degustaron carnitas, arroz y tortillas hechas a mano.

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Foto: Cecilia Espinoza Galindo

cdch