Alta demanda frenará mercado de baterías de litio

México.- Lo único que detendrá la comercialización de las baterías de litio es la escasez de materias primas. De aquí al 2030 se calcula que la producción mundial de ese mineral sea del orden 475 mil toneladas, pero la demanda será de 513 mil; en cinco años superará a la producción. El asunto es que su explotación es muy contaminante, lo que lleva a poner la atención en otras baterías, como las de vanadio, señalaron especialistas en el Jueves de Ciencia. Nuestra nueva realidad, de Fundación UNAM.

En el ciclo de documentales y diálogo con académicos, dedicado al tema “Alternativas a las baterías de litio”, Ivonne Liliana Alonso Lemus, del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados, Unidad Saltillo, refirió que, aunque el litio tiene muchas aplicaciones, en las industrias cerámica o médica, por ejemplo, se estima que en el año 2022 el 80 % de la producción mundial se ocupó en el mercado de las baterías.

En la sesión transmitida por TV UNAM, la científica dijo que la solución para sustituir el uso de combustibles fósiles no está en una sola tecnología, se requieren varias para abastecer la demanda de energía. Y respecto de los impactos ambientales que causa hacer esa transición energética, aún hay muchos retos.

Hay estudios que establecen que el reciclaje de litio presenta números positivos con respecto a su extracción del yacimiento, porque tiene una menor huella de carbono, pero sólo en el caso de las baterías que contienen otros metales de interés, como el níquel o el cobalto.

No obstante, cuando se hace el mismo análisis para reciclar baterías nuevas, con base fosfato, como las que se usan en la industria automotriz, los números “ya no son tan interesantes y aún no es factible ese proceso”; sin embargo, se sigue haciendo investigación y teniendo un panorama amplio de inversión para apostar a la electromovilidad, que es un factor clave en sitios como la Unión Europea, China y Estados Unidos.

De la lista de 34 materiales críticos elaborada por la Agencia Internacional de Energía, 25 de ellos se pueden extraer en América Latina y países del Caribe. “El potencial que tenemos es grande”; por ejemplo, las mayores reservas de litio están en Bolivia, que junto con Chile y Argentina suman el 53 % de la reserva mundial del mineral, comentó Ivonne Liliana Alonso.

En tanto, en Europa y China se concentran las empresas que reciclan el litio de las baterías; así se establecen alianzas para lograr la seguridad económica en todas las regiones que se vean implicadas, concluyó.

Otras opciones

César Ángeles Camacho, investigador del Instituto de Ingeniería de la UNAM, resaltó la creciente necesidad de almacenar la energía eléctrica. Hacerlo, permite obtener nuevas tecnologías derivadas, como la movilidad o la integración de más energía renovable a las redes eléctricas.

Sin embargo, esa demanda, traducida en los materiales que se ocupan para ese fin, “va a colapsar”, porque no son suficientes; de ahí que los autos eléctricos no han tenido el impacto que se esperaba en Europa, ejemplificó.

La explotación del litio es muy contaminante y se deben encontrar opciones. Como centros de investigación, tenemos que buscar alternativas de almacenamiento de grandes bloques de energía, destacó el científico.

Ángeles Camacho mencionó que atiende el área de sistemas eléctricos e integración de energías renovables a la red eléctrica. “Buscamos tecnologías de hardware y software para evitar apagones, así como opciones en las baterías para almacenamiento de grandes bloques de energía, e incluso, utilizar los vehículos eléctricos, como autobuses, para entregar energía a la red eléctrica”.

En la sesión que tuvo la presencia de Jaime Urrutia Fucugauchi, investigador emérito de la Universidad Nacional, exdirector del Instituto de Geofísica y consejero de Fundación UNAM, el universitario detalló que se están desarrollando modelos digitales de los cargadores eléctricos de los camiones, todo en conjunto con la red eléctrica de distribución.

Para el especialista, sería ideal alcanzar el 90 % de la recuperación de las baterías en el reciclaje. También recomendó utilizarlas lo más posible. “En los teléfonos móviles hay que esforzarnos más y usarlas hasta que ya no sea posible”.

En el caso de las baterías de autos, finalizó el universitario, pueden ser reutilizadas para los patines o bicicletas eléctricas, desagregando los módulos y dándoles un segundo uso antes del reciclaje.

Dionisio Meade y García de León, presidente de Fundación UNAM, aseguró que con estos programas “queremos que nuestra audiencia, principalmente quienes están por definir su vocación profesional, o por hacer sus estudios de licenciatura o posgrado, encuentren temas que les resulten sugerentes”.

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