Hoy, mientras arranca el Buen Fin 2025 en la Ciudad de México, comerciantes enfrentan un desafío adicional: la marcha de la Generación Z, que recorre desde el Ángel de la Independencia hasta el Zócalo, altera la actividad comercial en las zonas más concurridas de la capital.
El presidente de la Canaco Servytur CDMX, Vicente Gutiérrez Camposeco, señala que se esperan más de 65 mil millones de pesos en ventas durante el fin de semana. Sin embargo, los comercios ubicados en la ruta de la marcha ven ya cierres temporales o pausas en su operación para evitar conflictos con el tránsito y la seguridad.
Los sectores que enfrentan mayores afectaciones son restaurantes, tiendas de ropa, electrónicos y mueblerías, negocios que dependen del flujo constante de clientes durante esta temporada de descuentos. Según Gutiérrez Camposeco, aunque se proyecta un incremento de 31.9% respecto al año pasado, la marcha provoca ya retrasos y baja afluencia en puntos estratégicos.
A raíz de la movilidad limitada, algunos compradores optan por realizar sus compras en línea, mientras que otros buscan alternativas en zonas cercanas a la marcha, donde la circulación es más fluida. Los comerciantes reconocen que esta situación modifica la dinámica habitual del Buen Fin, especialmente en el Centro Histórico y Reforma, donde la concentración de tiendas y restaurantes es mayor.
En paralelo, la Canaco hace un llamado a los consumidores a evitar productos de procedencia china, advirtiendo que presentan baja calidad y carecen de garantía, en un intento de promover la compra en comercios locales y asegurar mayor respaldo a los clientes.
Mientras la marcha avanza y se mantiene la presencia de jóvenes en la capital, los comercios ajustan horarios, personal y estrategias de venta para minimizar el impacto. Así, el Buen Fin 2025 transcurre entre descuentos y promociones, pero también bajo la influencia directa de un movimiento social que altera la rutina de compradores y comerciantes por igual.
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