Luego de que en redes sociales comenzaran a circular mensajes advirtiendo sobre presuntas visitas domiciliarias masivas por parte del SAT durante el mes de junio, el organismo fiscal salió a desmentir públicamente la información. A través de un comunicado difundido este jueves, la dependencia aclaró que **no se están realizando operativos masivos ni revisiones focalizadas a ningún sector específico de contribuyentes**.
Las versiones que se hicieron virales en las últimas semanas generaron preocupación principalmente entre trabajadores asalariados, personas del Régimen Simplificado de Confianza (RESICO), arrendadores, y jubilados, quienes temían recibir multas o inspecciones sorpresa en sus domicilios fiscales. Sin embargo, el SAT fue enfático: **no existe ninguna campaña de visitas generalizadas, y cualquier revisión debe estar sustentada por ley.**
Visitas, sólo bajo condiciones específicas
El SAT sí tiene la facultad legal de realizar visitas domiciliarias, pero no de forma arbitraria. De acuerdo con el artículo 42 del Código Fiscal de la Federación, **estas inspecciones únicamente se llevan a cabo cuando existe una razón concreta para sospechar de alguna irregularidad fiscal**, como el incumplimiento de obligaciones, diferencias notorias en declaraciones o actividad económica no registrada correctamente.
Las visitas pueden incluir la revisión de libros contables, inventarios y comprobación de la actividad real del contribuyente, pero deben cumplir con requisitos legales: una orden escrita, notificación formal y respeto a los derechos del ciudadano. No pueden realizarse por simple sospecha, ni aplicarse como medida intimidatoria.
Sin persecución a jubilados ni “terrorismo fiscal”
Una de las principales inquietudes era la supuesta inclusión de jubilados y pensionados en estos operativos. El SAT aclaró que **ese grupo no forma parte de sus prioridades de revisión** y que solo en casos excepcionales podrían recibir alguna verificación. Además, la institución rechazó cualquier intento por generar miedo entre la población o fomentar la idea de que se vive una etapa de "terrorismo fiscal".
El organismo aprovechó para subrayar que la mayoría de los contribuyentes ya cumple de manera voluntaria con sus responsabilidades fiscales, lo cual ha reducido la necesidad de medidas correctivas.
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