Ciudad de México, México. – Joaquín Guzmán López , alias “El Güero” e hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera , se declarará culpable por narcotráfico ante una corte federal en Estados Unidos , según documentos judiciales presentados en el Distrito Norte de Chicago, Illinois .
De acuerdo con el expediente, la audiencia originalmente programada como sesión de estado fue modificada a “audiencia de cambio de declaración” , y se llevará a cabo el 1 de diciembre de 2025 a las 13:30 horas ante la jueza Sharon Johnson Coleman . El aviso fue enviado formalmente por el tribunal a las partes involucradas.
El pasado 30 de julio , Guzmán López había sido declarado inocente de los cargos en su contra. Sin embargo, fuentes judiciales confirmaron que el hijo del exlíder del Cártel de Sinaloa busca alcanzar un acuerdo con el Departamento de Justicia estadounidense (DOJ) , en condiciones similares a las que negoció su hermano Ovidio Guzmán López , quien también enfrenta procesos en ese país.
Joaquín Guzmán López llegó el 25 de julio de 2024 a un aeropuerto de Nuevo México en un avión privado , acompañado por Ismael “El Mayo” Zambada García , uno de los principales jefes del Cártel de Sinaloa . Según versiones judiciales, el acusado pretende colaborar con las autoridades de Estados Unidos y brindar información sobre las operaciones criminales del grupo liderado por sus hermanos Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar , conocidos como “Los Chapitos” .
El presunto acuerdo de cooperación contemplaría que Joaquín, al igual que Ovidio, se convertiría en testigo protegido del gobierno estadounidense , proporcionando detalles sobre las estructuras operativas del narcotráfico , incluyendo a miembros del cártel, funcionarios, políticos, militares y policías involucrados en las redes de narcocorrupción .
De concretarse el convenio, “El Güero” podría evitar la cadena perpetua y recibir una sentencia reducida de entre cinco y siete años de prisión , siempre y cuando cumpla las condiciones impuestas por la fiscalía y la corte federal .
El caso representa un nuevo golpe al liderazgo histórico del Cártel de Sinaloa , ya que los hijos de “El Chapo” Guzmán —antes aliados— enfrentan ahora procesos judiciales separados en Estados Unidos y podrían testificar en contra de su propia organización a cambio de protección legal y reducción de penas .
